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La Fundación de la República
Desde el flujo de la vida, donde convergen todas las almas, se desprende una diminuta porción. Viviendo, experimentando, finalmente muriendo y regresando. El flujo del que se habla tiene un nombre, “Symphony” y este nombre se debe a que está compuesto por algo que viene fluctuando desde la creación de las primeras vidas, el anhelo. Todos estos deseos se desbordan desde pensamientos y susurros fuertes que se transforman en sonidos armónicos cuando llegan hasta su origen espiritual dándole sentido a su nombre.
Cuando alguien piensa fuertemente en algo que quiere intensamente, envía un mensaje a Symphony, y no se da cuenta de que parte de su alma se separa, manifestándose como un nuevo ser (alter ego espiritual del humano) en otra dimensión. En ese lugar, razas, naciones y muchas criaturas vivían en armonía, no cabe duda de que muchos relatos fantásticos nacieran de allí. Esto es porque muchas veces los humanos pueden soñar cosas que experimentan sus anhelos materializados en el otro mundo y viceversa.
En Symphony, los anhelos o alters nacen para cumplir el deseo por el cual fueron creados, y eso se logra acumulando experiencias que muevan la casualidad a favor de su humano, ya que toda acción en este mundo repercute simbólicamente en la tierra. Sin embargo no es sencillo, en este mundo no todos han podido encontrar su camino y los que han fracasado, se han acumulado por miles de años formando unos seres caóticos, quienes desbordan su frustración convirtiéndose en monstruos que son muy contrarios a los espíritus que habitaban ese lugar.
Disonnance, era el nombre de la gran entidad que se creó producto de la acumulación de anhelos frustrados, y eventualmente se alzó para buscar el controlar la casualidad a placer, algo que ni Symphony como entidad tenía la voluntad de hacer. Debido al gran peligro, todas las razas de anhelos se unieron en una alianza para luchar contra el enemigo común, a pesar de todos los conflictos políticos que ya existían, sin embargo este cese al fuego no era suficiente para plantar cara a la amenaza.
Poco después, una guerra que duro cientos de años se desató, y solo fue hasta que el sacrificio de 4 héroes de diferentes razas logró sellar a Disonnance, marcando un inicio de una nueva era de paz momentánea, ya que aún quedaban fuerzas del caos en el mundo.
Por esa razón, en honor al gran ejemplo de unión de los 4 ahora dioses, se fundó “La República” una alianza mucho más fuerte e igualitaria, una porción de territorio al norte separada por aguas, ríos y bosques profundos que llevan a las 8 naciones principales de las razas. Asimismo se pusieron en marcha métodos para combatir la amenaza latente en conjunto. Cuatro gremios recibirían a todos los voluntarios bajo un concejo imparcial conformado por los 8 sabios (1 por nación).
Symphony, El cataclismo
Resumen de sucesos:
Symphony siempre había sido parte de un todo. La otra mitad que daba equilibrio al mundo como lo conocemos. Una dimensión necesaria para dar balance a ciertos sucesos cósmicos. Un lugar donde los deseos de las almas mortales tomaban forma para dar sentido al curso de su vida y las diferentes ramificaciones de un mismo camino; aquello que muchos llaman destino.
Aunque un ser humano dedicara su vida a un propósito no siempre este se cumplía, llevándolos al fracaso y ocasionando daños colaterales que no estaban contemplados en esta dimensión y que poco a poco fueron fracturando la realidad. Toda esta energía negativa se fue acumulando en los cimientos del espacio durante años. Energía que gracias a las cualidades mágicas de esta tierra tomó una conciencia y forma física, caótica y destructiva: Dissonance. El nombre por el que fue conocido ya que en la hermosa sinfonía de este mundo él era la disonancia que la hacía imperfecta. Los anhelos que fracasaban eran corrompidos por los mismos sentimientos que los llevaron a perder su rumbo, así fueron desterrados y condenados a vagar por tierras baldías. Dissonance no toleraba este trato para los que consideraba sus iguales, y tras hacerse con más poder decidió iniciar una guerra, una que acabaría con el orden mundial para realmente dar un trato igualitario a cada uno de los seres que lo habitaban.
Gracias a la unión de un sinfín de razas y la organización ya establecida por ciertos entes de poder, Dissonance fue sellado y contendido. Pese a esto Symphony seguía cambiando, lejos de ser una evolución parecía querer mutar para adaptarse a la corrupción, dotando a los anhelos desterrados una chispa de esperanza que se iba asentando cada vez más. Estos cambios envenenaron la tierra y originaron catástrofes en todas partes. Todos los anhelos que servían a la misma causa se aliaron en pro de proteger lo que muchos tenían en común: sus sueños, propósito, y su misma existencia en este plano.
Por cientos de años el mundo vivió en una aparente “paz”, manteniendo a raya a los seres que aún sobrevivían con los vestigios de la energía oscura y los sueños incompletos que aún se daban en este lugar. Esta paz se vino abajo cuando el sello se rompió, dejando escapar Dissonance y alertando a todas las naciones de una posible segunda guerra de proporciones aún mayores, pero para sorpresa de todos no fue así.
Gracias a los años en los que la conciencia de esta entidad estuvo sellada, al ser libre comprendió que no había nada que pudiera hacer para cambiar las leyes de ese universo, y que solo podía dejar que el mundo se viniera abajo bajo su propio error. Dissonance finalmente se desintegró en energía y ascendió para unir su esencia al flujo de la vida que rodeaba las dimensiones.
Aun así todo tendría consecuencias y la decisión que tomó los llevó a una nueva era. Cuando la energía fue liberada a plenitud para su ascenso colisionó con el flujo de la vida, forzando su integración y fusionando dos entidades cósmicas que jamás debieron tener contacto. Por una lado estaba Symphony como un todo, que traía a los anhelos y los guiaba en su propósito, y del otro extremo Dissonance, que surgió para proteger a esas almas que no recibían un trato digno y fueron condenadas al abandono por errores que parecían no tener perdón en esta realidad. Esperanza y Frustración, dos fuertes sentimientos que luchaban por mantener el control del mundo, uno que comenzaba a sufrir las consecuencias de acumular tanta energía. La expansión de este poder no solo golpeó a Symphony, sino que también logró cruzar dimensiones y afectarlas; incluida la tierra. Las primeras consecuencias de esto fueron los severos cambios climatológicos y puntos de energía que por escasos segundos se lograron percibir por la tecnología humana, captando su interés.
El tiempo pasó y las consecuencias se fueron dejando ver a lo largo de los años en los que aquel evento suscitó. La guerra contra Dissonance había acabado finalmente, la alianza y los gremios ya no eran necesarios y los líderes de cada raza decidieron prescindir de su participación; ya no era sostenible. Ahora luchaban por intereses propios, el mundo se había vuelto hostil y debían asegurar su supervivencia lejos de anteponer los designios del universo.
Muchos de los anhelos hicieron nuevas vidas lejos de lo que se conocía como la Republica, otros simplemente desaparecieron y jamás se volvió a escuchar de ellos. Los conflictos entre naciones no tardaron en generarse. La toma de recursos y tierras fueron la principal razón, y esto duraría al menos unos cuantos años hasta que la paz volvió. Cada nación encontró la forma de sustentarse con ciertas riquezas que su mismo territorio tenía para ofrecer. La economía cambió y las nuevas almas llegaban con un propósito más natural, sin apegos guiados por leyes o alianzas.
Algunas razas nuevas aparecieron gracias al cataclismo energético. Otras desaparecieron al no poder desarrollarse sin su favorecido estilo de vida y los que no deseaban desaparecer con ellos cambiaron su naturaleza para unirse a otros grupos y asegurar así su supervivencia. Fueron años difíciles, pero finalmente lograron encontrar un equilibrio que los mantuvo en paz por algunas décadas.
Actualidad
En Symphony el tiempo transcurre mucho más lento que en la tierra, tres veces más para ser exactos. Lo que para este mundo serían quince años, en la dimensión humana habrían pasado al menos cinco. Fue tiempo suficiente para que los humanos avanzaran en sus investigaciones, aferrándose a esa gigantesca gráfica que se dejó percibir por unos segundos y que podría significar una esperanza energética para su planeta. Si lograban dar con el origen de esa energía desconocida que hizo estallar sus sensores y sobrecargó sus plantas en segundos podrían quizás ver a la humanidad extender su vida un par de milenios más, ya que gracias a la onda dejada por Dissonance tras su liberación y los fuertes cambios climáticos en la tierra esta comenzó a enfermar a ritmo acelerado. El aire ya no era puro y la situación iba empeorando cuando nuevas cepas de enfermedades comenzaron a amenazar con la extinción. Los humanos tenían un propósito claro; sobrevivir.
En una de sus muchas incursiones, Dissoance dejó una brecha abierta que se ubicaba en New York, una que mantuvo por años Rossette y ahora parecía ser el lugar de estudio y base militar para la organización llamada DOGMA. La grieta que ahora estudiaban para su ingreso a lo que parecía una nueva dimensión era información clasificada y nadie aparte de ellos sabían de este lugar. La zona fue considerada peligrosa para la vida humana, y restringida solo para personal autorizado.
Tras muchos años se aprobó la primera iniciativa para abordar este mundo. Mucha tecnología y millones fueron invertidos para enviar un grupo de especialistas a investigar este nuevo mundo. El traslado era más que complicado y desconocido pero los resultados de la investigación podían dar avances importantísimos para la humanidad y como resultado el poder usar esa energía que provenía de la grieta dimensional.
DOGMA: Una organización militar vinculada a la alta tecnología, con tendencias religiosas. Formada por uno de los conglomerados empresariales más grandes de la Tierra, abarcando multitud de rubros en todas las ramas conocidas de la economía, y teniendo dentro de su bolsillo a gobiernos de importantes países con un alto nivel de desarrollo. Buscan la unificación mundial sin órdenes dictatoriales. Creen fervientemente que lograr este objetivo eliminaría de raíz todos los conflictos de la raza humana, dotando ya de paso a la organización del poder para gobernar el planeta, y asegurar así la paz.
Sus instalaciones científicas fueron las que percibieron el pico de energía producido en Symphony, y desde ese momento comenzó una carrera frenética por el descubrimiento de aquello que era capaz de producir una cantidad tan enorme de energía, detectable incluso a una distancia tan grande como la que separa a la tierra de ese punto distante en el espacio. Con el tiempo, dieron con la brecha que había usado la Dríade Rosette para llegar a la Tierra.
Ahora DOGMA era dueña de aquella brecha clasificada, y que fue la cumbre de sus experimentos. Aquel mundo solventaría crisis globales, serviría para idear curas para múltiples enfermedades e incluso luchar contra la muerte misma. DOGMA sentía que la mano de Dios estaba allí frente a ellos, y harían todo en su poder para hacerse con esta, incluso si eso significaba sacrificar algunos peones en el intento.
Al abrir el portal por primera vez comprendieron que dicha energía era algo que la raza humana hasta el momento no había sido capaz de manipular. Magia en su estado más puro, capaz de lograr cosas increíbles, con un mínimo esfuerzo y costo. Las promesas de resultados jugosos motivaron mayores inversiones en el proyecto cuando las primeras muestras permitían cargar núcleos gigantescos de energía con una pizca de la muestra residual.
Una vez los preparativos estuvieron listos decidieron aprobar un proyecto de exploración, pero al parecer sería sumamente complicado el poder acceder a esa dimensión por lo que a través de los años se investigó y trabajó para poder conseguirlo. Diferentes experimentos y descubrimiento clasificados fueron utilizados en busca de una esperanza que dotara a los humanos de alguna posibilidad. La cúspide de dichas investigaciones llegó con el proyecto ‘’Génesis’’, un proyecto llevado a cabo por prominentes genetistas de la compañía, quienes tenían un objetivo ‘’sencillo’’: Crear vida. Los resultados no tardaron en llegar. Mezclando muestras de tejido humano con la energía obtenida del portal consiguieron crear una raza de criaturas extremadamente inteligentes, aunque con un defecto de iguales proporciones: Necesitaban de un cuerpo vivo para su sustento. En otras palabras, un parásito.
Dichos parásitos poseían un alto nivel de adaptación, pudiendo introducirse en casi cualquier criatura hecha de materia orgánica, y crear rápidamente una relación de simbiosis con dicha forma de vida. Una destacada científica, la botánica y genetista Maríe Rose encontró la fórmula para desactivar la enzima que hacía peligrosos a los parásitos y obtener los beneficios de su simbiosis sin generar mayores riesgos. Usó las enzimas de un hongo extraño que adormecía las células del organismo y les permitía inhibir su conciencia. Los científicos de la compañía no tardaron en transformar a dicho parásito en una especie de suero bajo su guía. El suero fue probado en muchos soldados, los cuales a los pocos días comenzaron a desarrollar increíbles mejoras físicas sin consecuencias graves. Únicamente se señaló que su gusto por la carne aumentó y los que no consumían proteínas sintieron una necesidad irremediable por esta.
Todo marchaba a las mil maravillas. Gracias al suero los soldados tenían más compatibilidad con la grieta, por lo que se aprobaron los primeros viajes hacía el otro mundo.
Aunque existían dos factores que los científicos no tuvieron en cuenta a la hora de crear este parásito: La radiación del portal y la energía mágica que abundaba en Symphony. Un primer grupo de militares llegaron a esta tierra, descubriendo el nuevo mundo que yacía frente a sus ojos.
El gozo y júbilo se apoderó del grupo que intentó comunicar el estatus de la misión, pero no podían contactar con la base. Horas después comenzó la primera crisis para los humanos. Los más débiles comenzaron a caer uno a uno. La radiación del portal había sido demasiado para ellos, pero algo más pasó. El parásito quien había estado dormido despertó al no recibir señales de vida de su anfitrión. Desesperado por sobrevivir activó sus defensas y logró mutar a ritmo acelerado las células muertas para dar como resultado un ser grotesco y amorfo; una mezcla entre un humano y una especie de criatura fúngica.
La criatura tenía una necesidad voraz por alimentarse, y aunque se intentaron defender muchos cayeron presas de estos, repitiendo el mismo destino ya que al parecer todos los parásitos tenían el mismo sistema de defensa que aseguraba su supervivencia.
Los soldados que lograron evadir la muerte y ataque de estas criaturas se aislaron en un búnker que habían trasladado desde la tierra y que por el momento los mantenía a salvo de la amenaza. Estaban asustados y sin poder comunicarse con la base, ajenos a saber que aquello que realmente les brindaba grandiosas habilidades también se convertiría en un problema a futuro, pues aunque al morir se desarrollaban esas criaturas, si el tiempo transcurría y el parásito seguía recibiendo energía propia de Symphony crecería y se alojaría en alguna parte de su cuerpo (casi siempre uno de los brazos) hasta tomar conciencia.
Aunque los soldados no podían comunicarse con los altos mandos de DOGMA, ellos sí que eran testigos de lo que estaba ocurriendo, comenzando a mover los hilos y tomando decisiones conforme iban descubriendo más; tanto del suero como del nuevo mundo.
Entre los altos cargos de la compañía, existen creyentes que están totalmente seguros, que esos resultados “mágicos” de los experimentos, solo pueden ser originados por Dios, quien ve con buenos ojos la conquista del nuevo paraíso, y la unión de toda la raza humana bajo un mismo DOGMA.
El tiempo pasó. Los de DOGMA decidieron usar este grupo de soldados como sus primeras pruebas en el mundo. Enviaban cargamentos por el portal ya que no sufrían daños por la radiación. Comida, armas, vehículos pero ni un solo medio para comunicarse y aunque intentaban enviar algo desde Symphony no había respuesta asertiva. Los humanos confundidos siguieron los protocolos establecidos y armaron campamentos con un alto grado de tecnología cerca de la grieta. Equipados con las nuevas armas, transporte y una forma de vida parásita para mejorar sus capacidades y elevar su porcentaje de supervivencia. Aun así con todo en contra no dudaron en atacar a las especies nativas, generando conflictos y el rumor de la nueva amenaza que se extendió por todas las naciones. Las razas no eran ajenas a los humanos, más bien era un caso extraño y que debían estudiar para proceder con cautela. Lo único que podían hacer los nativos de Symphony era obligarlos a retroceder mientras los líderes de cada nación y personalidades importantes se reunían para debatir que hacer, pese a sus desigualdades.
Las criaturas mutantes ahora vagan por las diferentes naciones, asesinando y contagiando a cada cadáver con el que tenían contacto. La situación terminó con los días de paz en Symphony. Una nueva amenaza se posó sobre todos, una para la que realmente no estaban listos.
Las más fuertes barricadas se alzaron en las fronteras. Guardias de élite y exitosos veteranos que antes sirvieron a la alianza permitieron que aun existiendo esta amenaza siguieran viviendo sus vidas de la forma más normal posible. Algunos como parte de los que quieren volver a ver a Symphony como un lugar pacífico y lleno de paz. Otros atemorizados con la nueva era de oscuridad que aseguraban vendrían para esta tierra.